" EL CRISTO SEGÚN LA SÍNDONE "

Vivimos en tiempos difíciles para la fe y los creyentes. A pesar de ello, de vez en cuando surgen trabajos interesantes que colaboran con esa gran tarea que es la Predicación del Evangelio de la Gracia.

La Síndone o Santo Sudario, del que protagonizara un bello film el actor Víctor Mature (también protagonista de Sansón) es ahora motivo de estudios pues hace ya muchos años los científicos Jackson y Jumper del proyecto STURP, descubrieron hechos prodigiosos al estudiar de modo empírico la sábana que se supone cubrió el cuerpo de Nuestro Señor tras su muerte y que reside en Turín.

El lienzo es un paño muy bien conservado, de casi 3 metros de envergadura que retrata por las partes frontal y posterior a un hombre en posición extendida, con las manos sobre el abdomen y una pierna levemente flexionada.

Al realizarse el estudio el mismo reveló algunos hechos que demuestran que no es una pintura o un tipo de arte de épocas medievales.

1. El lienzo presenta diversos cortes, amputaciones y remiendos de épocas posteriores al siglo I, producidas por un incendio y salpicaduras de plata fundida y agua en siglos recientes.
2. El tejido era común en el siglo I en la zona de Tierra Santa, con una urdimbre poco común en Europa hasta siglos posteriores llamada espina de pescado.
3. La imagen no presenta restos de oleos ni sedimentos de tintes naturales o químicos sino que se formó por abrasión de las hebras más superficiales del mismo.
4. En el rostro del hombre muerto, se puede ver una deformación del pómulo derecho. Este hallazgo, corroboraría que tras ser interrogado por el anterior jefe del Sanedrín, Anás, su sirviente le golpeó en la cara con un báculo u objeto contundente. La imagen sindonítica refleja de nuevo este hecho.
5. La imagen es tridimensional y debió formarse por una radiación de origen desconocido mientras el cuerpo permanecía en reposo e ingrávido.
6. Sobre la imagen pueden verse dos leptones sobre sus ojos cerrados (monedas pequeñas de uso en el siglo I) con la leyenda DE TIBERIU CAISARIS, con el nombre del Emperador Romano bajo suyo mandato se supone fue ejecutado el nazareno. Costumbre de la época.
7. Pueden verse claramente sobre la imagen del cuerpo 120 cortes o trazos de flagelo romano: 30 golpes eran suficientes para matar a un hombre normal, lo cual prueba que este ser poseía una corpulencia y resistencia sobrehumana. También pueden verse trazas de sangre que tras ser analizadas corresponden al tipo AB, común entre los judíos. Estas manchas corresponden a la frente, costada, muñecas y pies, tal como refieren Las Escrituras. En el Imperio Romano al que se crucificaba no se le flagelaba a un tiempo, era o una cosa o la otra. Punto que de nuevo corrobora Los Evangelios.
8. El palinólogo Max Frei halló restos de flora halófita y plantas extintas, la mayoría pertenecientes al desierto del Negev y zona de Tierra Santa.
9. La pierna derecha aparece flexionada sobre la izquierda, por lo que estudios iniciales creyeron que el hombre de la Síndone era cojo. Este efecto físico debido al rigor mortis se debe a que el hombre murió mientras permanecía de pie en una posición forzada, debido a que ambos pies estaba cosidos por un clavo, el cual recoge la imagen sindonítica claramente.
10. La sangre de la marca del costado no es sangre venosa sino sangre arterial. Al ejecutar la lanzada, Longines traspasó la vena cava superior y se derramó sangre y agua (líquido seroso del Pulmón).
11.  Los estudios con radio carbono 14 databan este lienzo en el siglo XII. ¿Cómo por tanto puede afirmarse que este tejido cubrió el cuerpo de Cristo en el S. I?

La posibilidad es la siguiente: la datación del tiempo por carbono 14 se efectúa midiendo la pérdida de isótopos de un cuerpo. Si dicho cuerpo recibió o emitió una descarga de energía radiante para realizarse la desaparición del cuerpo… este lienzo pudo ser bañado de modo extraordinario de isótopos, Con lo cual a efectos de lectura, el tejido quedó rejuvenecido. Así, su antigüedad no puede basarse en ese tipo de lectura por estar dañado a nivel radiactivo. El resto de pruebas justifican el relato de La Biblia.   

Quede para cada cual la reflexión de este  texto.

Lectura recomendada:

 Libros del Padre Jorge Loring sobre el Sudario.

 Libro “El Enviado” de J. J. Benítez.

Por Fr.Ramón