DIA TRISTE PARA LA ORDEN DEL TEMPLE

Amado hermano Antonio Medina Gete:

Hoy en este día decidí hacerte una carta, la verdad no sé cómo empezar de tantas cosas que tengo en mi cabeza, sinceramente, me cuesta pensar en que te voy a escribir, imagínate que te vengo viendo casi todos los días, y ahora, de un día para el otro te me vas… En este día nos despedimos de ti, hermano de mi corazón.

Me gustaría decirte que desde que partiste todo está bien, que todos seguimos nuestras vidas, que seguimos sonriendo como siempre y que nuestras almas siguen intactas… pero no es así.

Todos los que te queremos y extrañamos tenemos el mal habito de extrañarte más de lo debido, y  nos preguntamos  porque te llevo tan pronto, planeábamos una vida con vos, queríamos hacer esos proyectos con vos quien, queríamos que seas vos quien nos ayudaras a fortalecer ese temple , como lo fue en antaño…te acurdas? Que hermosos momentos que pasamos? Yo me acuerdo como si fuera ayer… y amo tanto esos momentos! Tanto que me gustaría volver el tiempo atrás para volverlos a vivir! 

Me gustaría volver atrás y abrazarte mas, besarte mas y decirte muchas veces mas lo mucho un Triple Abrazo querido Hermanos! Me acuerdo cuando me decías eso “…a que esperas?…” Dios! Me dejabas bloqueado con eso! Y yo vivía escapando las respuestas para no decir que adelante! Porque fui tan idiota? Porque no decirte “Si hermano, ADELANTE! Ok?”

Es tan feo quedarse sin decirle a alguien lo mucho que lo quieres!

Sois Nuestro mejor amigo hermano! Y sabes que te queremos más q a nadie en el mundo! Y lo hago hace mucho tiempo! Desde el día que te conocimos, solo que nos dimos cuenta después y depuse ya fue tarde hermano.

Nos ayudaste cuando Más lo necesitamos, fuiste nuestro confidente, mi amigo, nuestro todo… Y hoy no te das una idea de lo mucho que te necesitamos!
Tenemos mucho miedo de olvidarte hermano, de olvidar tu voz, tu sonrisa picara, tus gestos, tus locuras…No quiero que estés donde estas, porque me duele mucho que no estés aquí con Nosotros… Soy egoísta, y lo sé y no me importa, porque prefiero arder en un infierno que vivir sin vos…

                                  

Pasamos muchos infiernos juntos, y lo superamos, juntos…pero de este siento que no puedo salir, si no estás con Nosotros… no puedo ver el sol…
Ya no existe sol para mi…
Como puede existir cuando pasamos por la puerta de tu casa y esperamos verte en ella?
Como puede existir si cada vez que soñamos, es con vos…
Como puede existir si cada vez que alguien dice “hermano”, yo no te tenemos?
Nos dejaste solos Hermano…sin ese lazo único que nosotros teníamos…

Y mañana? Que pasa con nosotros mañana? Cuando no estés…. Porque te fuiste Hermano? Cuando nosotros te necesitábamos tanto! Intentamos convencernos de que por algo no estas aquí con nosotros, de que esto, nos guste o no, es el Señor lo a querido…o algo por el estilo, pero como te dije “hermano”… Es difícil en creer en Nuestro Señor…

Estamos bien hermano, como siempre te dijimos que íbamos a estar, como la última vez que te abrace antes de irnos, que me dijiste “cuídate”…me sigo cuidando, ya no hay personas que rompan mi corazón ni que me lastimen.

Lo único que nos reconforta es saber que ahora estarás nuevamente en brazos del Señor, quien te cuidará y velará por ti por el resto de los siglos.

No es un momento fácil y la verdad es que todos la estamos pasando muy mal, pero lo mejor que podemos hacer para honrar tu vida es celebrarte, recordarte en los mejores momentos y rezar porque estés en un lugar mejor.

Te queremos mucho y eso es algo que no debes de olvidarte jamás. Qué descanses, hermano Nuestro y vela por todos nosotros.