No hace mucho tiempo en lo más recóndito del desierto, un grupo de nómadas se vio sorprendido en medio de la noche por una Luz blanca que desde el Cielo estrellado les dijo:
¡¡Recoged todas las
piedrecitas que encontréis por el Camino y guardarlas como si fuera un tesoro,
caminad durante toda la noche y así al llegar el alba os sentiréis contentos y
a la vez tristes!!
Los Hombres del
desierto se quedaron extrañados por lo sucedido y a su vez se quejaron de la
Luz pues, para ellos las piedras eran piedras y no tesoros como el oro, plata,
joyas....y encima tener que cargar con ellas kilómetros y kilómetros por
el desierto, sin embargo como eran también hombres de Fe decidieron entre Todos
hacer caso a la Luz misteriosa.
A la que se deslumbro
nuestro Padre Sol en el horizonte los Hombres metieron sus manos en los
bolsillos y no podían salir de su asombro. ¡Las piedrecitas se
habían convertido en grandes diamantes!
Se sintieron
contentos por ello, pero tristes por no haber recogido muchísimas más piedras y así
ser aun más inmensamente ricos.
Moralinaaa!!!!
Así es la Vida,
está llena de cosas que parecen carentes de sentido
un saludo, un beso, una
caricia, un te quiero "furtivo", pero son tan valiosas como los
diamantes.
No encontraremos
más valor en la Vida que en las pequeñas cosas cotidianas, Palabra de la Luz
misteriosa .
Fr.Candelas
+NNDNN+
★♥♥★
No hay comentarios:
Publicar un comentario